domingo, setiembre 10, 2006

Retorno, reencuentro y reconocimiento a la irreconocible patria

Una vez más, al grano. Europa-o sería mejor decir la visa- me dijo 'game over' y hube de emprender el retorno a las américas. Luego de un largo viaje contra el sentido natural de rotación de la tierra, un corto periódo por Miami y un corto vuelo hacia el Jorge Chavez pude decir que estaba en mi casa. No digo 'por fin' en mi casa pues si dependiera de mi seguiría en el viejo continente conociendo todo lo que aún me falta. Pero así como el almuerzo, las horas de sueño, y las ganas de comprar el viaje se acabó. Sí, el mejor viaje de mi vida terminó hace no más de una semana. Y en menos de un fin de semana estarán también terminadas las vacaciones.

Estoy contenta, tranquila y con algo de expectativa. Estar así es algo bastante raro para mí, y entre hacer todo para readaptarse no solo al horario sino a las obligaciones y asuntos pendientes resulta agotador pero no me ha puesto de mal humor. Aún.

Pues la PUC comienza el lunes y hay que despertarse temprano, las clases comienzan a las 8. Reconocer Lima en el trayecto desde el aeropuerto no es muy agradable pero almorzar arroz con pollo luego de una abstinencia obligada al arroz por casi un mes es más que reconfortante. Entre ver papeles, ordenar, guardar las malonas(maletas) se van acabando los días de vagancia y los de descubrimiento.

El regreso trajo consigo una inmediata salida nocturna y un reencuentro con la Leute, salud por ello.

No sé si relatar todo mi viaje, no se si vale la pena o si omitiré demasiadas cosas. Por el momento estoy asimilando mucho, y no tengo mucha inspiración. Para luego será.


0 comentarios: